De Madrid al cielo
El pugil saudí y su entrenador personal (el gran muftí)
No hay nada como merodear por la prensa extranjera para enterarse de qué va a ocurrir en este país, prisionero de unos medios mediocres, evangelizadores y serviles. Leo en el Christian Science Monitor que el ultrafundamentalista monarca saudí ha anunciado la celebración de una conferencia mundial sobre el diálogo interreligioso en Madrid los días 16, 17 y 18 de julio. En ella participarán representantes del islam, el judaísmo y el catolicismo. Si tenemos en cuenta que Arabia Saudí es uno de los pocos países que prohíbe la libertad religiosa, no es de sorprender que los interlocutores invitados a la conferencia emulen en intransigencia y fundamentalismo al guardián del wahhabismo y su muftí de cabecera, el jeque Abdulaziz al as-Sheij, con un largo historial de fatuas a cual más infame. La última, una auténtica herejía: "Obedecer al gobernante musulmán sin sedición es un principio básico para los musulmanes que siguen el camino del Profeta".
Por lo pronto, ha confirmado su asistencia, que se sepa, el rabino David Rosen, del American Jewish Committee, organización que premió a Uribe por su "incesante búsqueda de la paz, la seguridad y la prosperidad" y muy aficionada a la intimidación de quienes no comulguen con sus ruedas de molino. Han excusado su presencia por compromisos ya contraídos Al Gore y el arzobispo de Canterbury, así como el reverendo evangelista ultraconservador Franklin Graham, quien tiene la costumbre de calificar al islam de "perverso y demoníaco". Lástima, con lo que prometía semejante combate de pressing catch intelectual. Estaremos atentos a los invitados y el programa, del que sólo se ha avanzado que no se hablará de política y se centrará en "cómo preservar la moralidad". Y también a la presencia institucional española: ¿qué tal un dream team formado por Rouco, Kiko Argüello, José Bono, Paco Vázquez y el campechano homólogo español de Abdulá bin Saud? Mientras, una lectura imprescindible, la respuesta razonada e indignada de Abdennur Prado cuando el monarca saudí presentó al rey español “la versión islámica de la Alianza de Civilizaciones".
¿Se concertaría la cita durante el Golfo’s Tour? Quién sabe. Bienvenidos al akelarre.
3 comentarios
Algarabía -
Carlos, espeluznante. Si para evitar la sensación de enfado con Cheney tengo que imaginar que éste me amamanta, podría acabar dando rienda suelta a mis instintos más violentos. ¿Quién puede querer sentir afecto por Cheney?
Qué pena que no se haya incluido el budismo en esta conferencia. Ya tendrían un representante a la altura intelectual del patrocinador del evento, y encima todo un profesor de la Universidad de Columbia.
Lo que hay que leer.
Saludos a ambos
Carlos Sardiña -
-¿En que piensa cuando medita?
-Normalmente, trato de extraer cualquier tipo de pensamiento negativo que ronde mi cabeza y convertirlo en algo positivo. Por ejemplo, cuando estoy furioso con Dick Cheney, medito en que Dick Cheney era mi madre en una vida anterior y me daba el pecho.
-¿Quiere decir que fantasea con ser amamantado por Dick Cheney?
-Es una fantasía para liberarse del miedo y desarrollar los afectos. Es una manera de volver a sentir gratitud hacia él y ver su lado positivo, encontrando la madre en Dick Cheney.
http://www.nytimes.com/2008/06/29/magazine/29wwln-Q4-t.html?ref=magazine
¡Pues claro! ¿Cómo no se nos había ocurrido antes? Ni Alianza de Civilizaciones ni diálogo religioso. Lo que el mundo necesita son unas buena meditaciones en las que, por ejemplo, Ahmadineyad le de el pecho a Bush u Olmert le cante nanas a Haniya mientras duerme en su cunita...
mezque -
Habría que mirar por el ojo de la cerradura, seguro que montán una orgía.