Blogia
Algarabía

Afganistán, Obama y la neolingua

Si hay algo que Obama ya dejó claro durante su campaña electoral es su capacidad para hacer uso de la neolingua como herramienta política. Esta semana nos ha regalado dos ejemplos impagables. Así, nos hemos enterado de que, pese a a haber dicho lo contrario, sí permanecerán tropas de combate en Iraq tras la anunciada retirada de las mismas en 2010. Simplemente pasarán a llamarse advisory and assistance brigades. También hemos sabido que se han dado instrucciones para que, a partir de ahora, la expresión "guerra global contra el terrorismo" caiga en desuso y sea sustituida por, ni más ni menos, que overseas contingency operation.

En esa misma línea de pervertir la realidad mediante el empleo de eufemismos y justificaciones poco creíbles, Obama declaraba al anunciar la ¿nueva? estrategia para Afganistán y Pakistán: "No estamos en Afganistán para controlar ese país o decidir su futuro. Estamos para derrotar a Al Qaeda. Ése es nuestro objetivo. [...] El liderazgo de Al Qaeda está en Pakistán". Ante el inminente pacto con sectores de los talibán "moderados" (neolingua, una vez más, para "dispuestos a colaborar"), da la impresión de que el énfasis vuelve a ponerse en una resucitada al-Qaeda. (Texto íntegro de la declaración.)

Ahmed Rashid parece compartir, una vez más, los postulados de la Casa Blanca (al parecer, la nueva estrategia se basa en gran medida en un artículo que escribió con Barnett R. Rubin y que publicó en Foreign Affairs: "From Great Game to Grand Bargain"), respondía en una entrevista aparecida ayer en Público a la pregunta de cómo ve a al-Qaeda tras ocho años de guerra contra el terrorismo: "Es más fuerte que nunca. El único país donde está debilitada es Irak, aunque ahora han aparecido células de la organización donde antes no las había, como en Europa".

Fawaz A. Gerges, por el contrario, sostiene y analiza que al-Qaeda atraviesa una "enorme crisis de autoridad y legitimidad" y está más debilitada que nunca. Y en otro artículo titualdo "La peor visión sobre sobre al-Qaeda" afirma: "El conflicto en Afganistán y Pakistán reviste proporciones mucho más amplias y complejas que la concertación de una temible alianza de tribus pastunes y otras a ambos lados de la frontera contra la que consideran una amenaza extranjera contra su identidad y costumbres. La guerra ha atraído a algunos cientos de militantes islamistas de Cachemira, el mundo árabe e incluso Asia Central. Al Qaeda es un pequeño elemento de esta coalición, una especie de efecto secundario, un parásito que se alimenta del caos y la inestabilidad".

Nadie ha menciondo a Arabia Saudí, la larga sombra financiera e ideológica detrás de todo movimiento salafista, takfiri o al-qaedista que se precie. Y el virrey Hamid Karzai ya ha anunciado que apoya el plan estadounidenses porque "recoge las demandas del pueblo afgano". Sólo le ha faltado añadir el tópico tan querido por el inefable Thomas Friedman de que los soldados estadounidenses serán recibidos con flores y bombones, especialmente en las zonas donde la aviación o los drones no han dejado de causar bajas civiles ya con Obama al frente.

Aún no ha comenzado el surge, y a cinco meses de la farsa de las elecciones presidenciales afganas, el debate ya está servido. Pronto se reabrirá en España, cuando el gobierno anuncie el envío de más tropas a la guerra (labores humanitarias y de reconstrucción perpetradas sin abandonar la base, en neolingua).

Existe una excelente y exhaustiva bilbiografía sobre Afganistán recopilada por Christian Bleuer (en PDF).

3 comentarios

Pablo -

Soy un completo ignorante del tema, pero también atrevido, así que, ahí va.

Creo que lo que está ocurriendo en Pakistán/Afganistán -y pongo barra para no decir 'en la frontera entre'- es lo más crucial y grave -en términos de hard politics- de los últimos años y, a su vez, más desatendido o solapado -a propósito-.

Me da por pensar mucho cuando Estados Unidos bombardea sistemáticamente una zona del planeta sin que eso sea portada en (casi) ningún sitio.

De todas formas, creo que la doctrina que rige la implicación de Estados Unidos en Pakistán es: ¿qué es más fácil? ¿que los mulás iraníes consigan la bomba atómica o que los mulás pakistaníes accedan al botón que activa su bomba atómica?

Algunas claves desde el Imperio: http://www.newyorker.com/talk/comment/2008/12/15/081215taco_talk_packer

algarabia -

La verdad es que toda la zona es un polvorín y mucho más compleja geoestratégicamente que Iraq. Si a la complejidad que tiene le añades lo nefasta que es la información en este país, que hoy mismo se permite usar indistintamente taliban, al-qaeda e islamista como sinónimos, no nos queda otra que buscar fuera. Y hay mucho y bueno, tanto, que es imposible leerlo todo.
Curiosamente, hoy aquí nos enteramos de que la halcona Clinton ha ofrecido "integrarse" a los taliban que renuncien a la violencia y el extremismo. Otro ejemplo más de que nos toman por imbéciles. Al tiempo, se anunciaba que Karzai, uno de los "moderadísimos" (prácticamente un socialdemócrata para la "coalición"), pretende aprobar una ley que legaliza, de facto, la violación dentro del matrimonio.
A ver si puedo preparar otra entrada, que he leído cosas muy interesantes.

Un abrazo (sin neolinguas que valgan)

OC -

Parece que definitivamente el escenario se va situando en Pakistan. Y cuanto más focos le ponen más se ve lo sucio que está todo. Yo por lo menos, soy incapaz ya de distinguir entre los actores si hay alguno que tenga las manos limpias o que vaya a lavárselas en algo diferente que más sangre.
Como mucho veo distinguirse la camisa blanca de Obama, varios ejércitos de lavanderas y un anuncio enorme de que tal detergente lava más blanco.
Y además con tanto ruido que hacen, se entiende aún menos.
Pero gracias por tus desvelos en mostrarnos la información.
No sé cómo se dirá en neolingua, pero da igual: Abrazos.